Musa
paradisiaca L.
El nombre científico Musa paradisiaca L. y los nombres comunes banano,
plátano, cambur, topocho y guineo hacen referencia
a un gran número de plantas herbáceas del género Musa, tanto
híbridos obtenidos a partir de las
especies silvestres del género Musa
acuminata y Musa
balbisiana como de otros genéticamente
puros de esta especie. trazan una diferencia entre las bananas,
consumidas crudas como fruta de postre, y los plátanos, que por su
superior contenido en fécula deben asarse o freírse antes de su ingesta. La
diferencia no se corresponde exactamente con ningún criterio genético, no se puede
determinar si una planta producirá plátanos o bananas simplemente por su
constitución genética. La confusión aumenta por el hecho de que en otras
regiones los términos se consideran perfectamente sinónimos.
El banano no es un árbol sino una hierba perenne de gran tamaño. Como
las demás especies de Musa, carece de verdadero tronco. En su lugar,
posee vainas foliares que se desarrollan formando estructuras llamadas pseudotallos,
similares a vástagos verticales de hasta 30 cm de diámetro basal que no
son leñosos y alcanzan los 7 m de altura.
Las hojas
Se cuentan entre las más grandes del reino vegetal. Son lisas, tiernas,
oblongas, con el ápice trunco y la base redonda o ligeramente acorazonadas,
verdes por el haz y más claras por el envés, con los márgenes lisos y las nervaduras
pinnadas, amarillentas o verdes. Dispuestas en espiral, se despliegan hasta
alcanzar 3 m de largo y 60 cm de ancho; el pecíolo tiene hasta 60 cm.
Las hojas tienden a romperse espontáneamente a lo largo de las nervaduras,
dándoles un aspecto desaliñado. Cada planta tiene normalmente entre 5 y 15
hojas, las que no viven más de dos
meses.
El rizoma
Es el elemento perenne; es superficial o subterráneo, posee un tejido embrionario a partir del cual nacen entre 200 y 500 raíces fibrosas,
que pueden alcanzar una profundidad de 1,5 m y cubrir 5 m de superficie. Del
rizoma también brotan hijuelos, que reemplazan al tallo principal después de
florecer y morir. En los ejemplares cultivados solo se deja normalmente uno
para evitar debilitar la planta, pero en estado silvestre aparecen en gran
cantidad.
Las flores
Directamente a partir del rizoma nace una inflorescencia que emerge del
centro de los pseudotallos en posición vertical; semeja un enorme capullo púrpura
o violáceo que se afina hacia el extremo distal, con el pedúnculo y el raquis
libres de vellosidades. Al abrirse, muestra una estructura en forma de espiga,
sobre cuyo tallo axial se disponen en espiral hileras dobles de flores agrupadas
en racimos de 10 a 20 que están protegidos por brácteas gruesas y carnosas de
color purpúreo. A medida que las flores se desarrollan, las brácteas caen, un
proceso que tarda entre 10 y 30 días para la primera hilera.
Las primeras 5 a 15 hileras son de flores femeninas, ricas en néctar; en
ellas el tépalo compuesto alcanza los 5 cm de largo y los 1,2 cm de
ancho; es blanco o más raramente violáceo por el interior, con el color
trasluciéndose a la vista desde fuera como una delicada tonalidad purpúrea. Su
parte superior es amarilla a naranja. El tépalo libre es aproximadamente de la
mitad de tamaño, blanco o rosáceo, obtuso o trunco. Las siguen unas pocas
hileras de flores hermafroditas o neutras, y las masculinas en la región
apical.
El enorme peso de las flores hace que el tallo floral se incline hacia
el suelo en poco tiempo; a su vez, el fototropismo de las flores hace que se
dirijan en su crecimiento hacia arriba.
En las variedades híbridas cultivadas por su fruto, las flores masculinas
son estériles Las motas oscuras en la
pulpa indican el resto de los óvulos sin desarrollar.
El fruto
Este grupo de vegetales conforma la fruta tropical más consumida del
mundo. Se trata de una falsa baya, con forma de hoz o elongada, que crece en racimos de hasta 400
unidades y 50 kg de peso; de color amarillo cuando está maduro, es dulce y
carnoso, rico en fibras, carbohidratos,
potasio, vitamina A y C, es bajo en sodio y bajo en grasas. Es mucho más rico en calorías que la
mayor parte de las frutas por su gran contenido en fécula. Contiene los
carbohidratos más digeribles (el cuerpo puede quemar las calorías que ofrece
mucho más fácilmente que las que provienen de las grasas).
Se cultivan en más de 130 países, desde el sudeste asiático de donde son
nativas, hasta Oceanía y Sudamérica; el principal productor mundial es la India,
donde se cultiva casi un cuarto de los frutos comercializados en el mundo. El
principal exportador es Ecuador, que genera casi un tercio de las exportaciones
globales.
Temperatura y pluviosidad
Los bananos son propios de regiones tropicales y subtropicales, y rara
vez dan buenos resultados fuera de la banda comprendida entre los 30°N y 30°S; la mayoría
no prospera a más de 600 m de altitud.
La temperatura óptima para la floración ronda los 27º Cy el crecimiento
de los frutos se beneficia de una ligeramente superior. Por encima de los 37º C
las hojas padecen quemaduras y los frutos se deforman; por debajo de los 16º C
el ritmo de desarrollo se reduce sensiblemente. Las heladas son tremendamente perjudiciales; temperaturas
debajo del punto de congelación provocan la desecación de las partes verdes y
la eventual caída de los pseudotallos y hojas presentes. El rizoma las
sobrevive, y vuelve a brotar en cuanto la temperatura es adecuada.
El régimen de lluvias debe ser constante, con unos 100 mm mensuales
a lo largo del año, y no más de tres meses de estación seca.
El momento de la plantación depende del clima de la zona; es importante
garantizar un buen nivel de humedad en la fase inicial de crecimiento, así como
evitar a toda costa el anegamiento.