martes, 17 de mayo de 2011

UNA PALETA IMPRESIONISTA

"...captar la luz y plasmarla, directamente, sobre el lienzo".

                                                         Claude Monet


Mujer con sombrilla- Claude Monet- 1875

El movimiento impresionista, en lo que a pintura se refiere, tiene como principal objetivo recrear la esencia de un momento particular al aire libre, mediante pinceladas impulsivas y colores luminosos, alejándose de la fiel reproducción de las formas.
La fascinación de la luz y el cromatismo, cambiantes y espontáneos, necesitan de una paleta de colores puros, sin mezclar, que se yuxtaponen sobre la tela con innumerables y diestros golpes de pincel.                                  
                                                        
                                                    
La Grenouillère- Pierre Augusto Renoir- 1869
                                      
El otoño parece utilizar la misma técnica para deslumbrarnos con sus creaciones. Son tantos los cambios en los follajes, que me voy a ocupar sólo de algunos de ellos.


Hojas de fresno

Fresno: abunda en el arbolado urbano y es el que inicia el cambio de coloración otoñal; sus hojas compuestas, 
de 5 ó 6 folíolos oblongos,
se tornan amarillas y se
desprenden rápidamente de sus
largos pecíolos.
                                                                        

Hojas de liquidambar

                                            Liquidambar: bello árbol, de forma más o menos cónica, cuyas hojas
lobuladas en forma de palma,
largamente pecioladas, muestran
matices que van desde el rojo al
morado, violeta, amarillo y castaño. 
La infrutescencia, globosa, erizada, oscura y péndula, convive en su madurez con el follaje caduco. 




Tilo: ¿Quién no conoce este hermoso árbol, el mismo que perfuma nuestras calles, al final de la primavera? Ahora, en otoño, nos alegra con los tonos dorados de sus hojas grandes, acorazonadas,de borde aserrado y largamente
pecioladas.














                                                                        



Roble americano: sus hojas son simples, grandes, con lóbulos triangulares, que viran al bordó, en zonas muy frías, y al dorado, en zonas templadas.








Roble europeo: las hojas también son simples y lobuladas, pero los lóbulos son redondeados, el matiz otoñal es amarillo cobrizo y suelen permanecer largo tiempo en la planta.
                                                         




                                                            
                                                            
Plátano:  este árbol de gran porte, forma parte del arbolado urbano y es muy apreciado por su sombra estival que, en algunas avenidas, constituye un verdadero túnel reparador. Su fruto, sin embargo, produce trastornos alérgicos a las personas predispuestas a ello. El follaje otoñal es muy bonito, sus grandes hojas palmatilobuladas, de bordes dentados y largos pecíolos, adquieren hermosos tonos marrones y castaños.

 
                                                                            
Un párrafo aparte merecen los arces, en todas sus variedades, cuyos nombres vulgares son: japonés, menor, negundo, plateado, trinerve. El arce japonés (Acer palmatum) es un árbol de culto en el Japón. La gente se traslada a los bosques para disfrutar del momento en el que el KAEDE estalla en rojos y anaranjados, en una ceremonia que se llama KOYO. Preciosos tonos rojizos adoptan las hojas del arce trinerve, mientras que las de las otras variedades, viran al amarillo.

Kaede (arce japonés)


Arce plateado

Arce negundo

En esta época del año, las palabras no alcanzan para describir lo que ocurre en la naturaleza. Así era, seguramente, la urgencia que llevaba a los pintores impresionistas a instalar los atriles y las telas, al aire libre, para captar los cambios de luz en el momento mismo en que se producían. Salgamos también nosotros a admirar el espectáculo, es gratuito, está en cualquier espacio verde, disfrutemos de las veredas que el otoño alfombra y recojamos algunas hojas, las más bonitas, para que se queden a vivir entre las páginas de nuestro libro preferido.

Paisaje otoñal  natural

 
Paisaje otoñal- Camille Pissarro- Pintor impresionista