martes, 28 de enero de 2014

¡LA MÁS RICA!



Musa paradisiaca L.
El nombre científico Musa  paradisiaca L. y los nombres comunes banano, plátano, cambur, topocho y guineo hacen referencia a un gran número de plantas herbáceas del género Musa, tanto híbridos obtenidos  a partir de las especies silvestres del género Musa acuminata y Musa balbisiana como de otros genéticamente puros de esta especie. trazan una diferencia entre las bananas, consumidas crudas como fruta de postre, y los plátanos, que por su superior contenido en fécula deben asarse o freírse antes de su ingesta. La diferencia no se corresponde exactamente con ningún criterio genético, no se puede determinar si una planta producirá plátanos o bananas simplemente por su constitución genética. La confusión aumenta por el hecho de que en otras regiones los términos se consideran perfectamente sinónimos.
El banano no es un árbol sino una hierba perenne de gran tamaño. Como las demás especies de Musa, carece de verdadero tronco. En su lugar, posee vainas foliares que se desarrollan formando estructuras llamadas pseudotallos, similares a vástagos verticales de hasta 30 cm de diámetro basal que no son leñosos y alcanzan los 7 m de altura.
Las hojas
Se cuentan entre las más grandes del reino vegetal. Son lisas, tiernas, oblongas, con el ápice trunco y la base redonda o ligeramente acorazonadas, verdes por el haz y más claras por el envés, con los márgenes lisos y las nervaduras pinnadas, amarillentas o verdes. Dispuestas en espiral, se despliegan hasta alcanzar 3 m de largo y 60 cm de ancho; el pecíolo tiene hasta 60 cm. Las hojas tienden a romperse espontáneamente a lo largo de las nervaduras, dándoles un aspecto desaliñado. Cada planta tiene normalmente entre 5 y 15 hojas, las que no viven  más de dos meses.
El rizoma
Es el elemento perenne; es superficial o subterráneo,  posee un tejido embrionario a partir del  cual nacen entre 200 y 500 raíces fibrosas, que pueden alcanzar una profundidad de 1,5 m y cubrir 5 m de superficie. Del rizoma también brotan hijuelos, que reemplazan al tallo principal después de florecer y morir. En los ejemplares cultivados solo se deja normalmente uno para evitar debilitar la planta, pero en estado silvestre aparecen en gran cantidad.
Las flores
Directamente a partir del rizoma nace una inflorescencia que emerge del centro de los pseudotallos en posición vertical; semeja un enorme capullo púrpura o violáceo que se afina hacia el extremo distal, con el pedúnculo y el raquis libres de vellosidades. Al abrirse, muestra una estructura en forma de espiga, sobre cuyo tallo axial se disponen en espiral hileras dobles de flores agrupadas en racimos de 10 a 20 que están protegidos por brácteas gruesas y carnosas de color purpúreo. A medida que las flores se desarrollan, las brácteas caen, un proceso que tarda entre 10 y 30 días para la primera  hilera.
Las primeras 5 a 15 hileras son de flores femeninas, ricas en néctar; en ellas el tépalo compuesto alcanza los 5 cm de largo y los 1,2 cm de ancho; es blanco o más raramente violáceo por el interior, con el color trasluciéndose a la vista desde fuera como una delicada tonalidad purpúrea. Su parte superior es amarilla a naranja. El tépalo libre es aproximadamente de la mitad de tamaño, blanco o rosáceo, obtuso o trunco. Las siguen unas pocas hileras de flores hermafroditas o neutras, y las masculinas en la región apical.
El enorme peso de las flores hace que el tallo floral se incline hacia el suelo en poco tiempo; a su vez, el fototropismo de las flores hace que se dirijan en su crecimiento hacia arriba.
En las variedades híbridas cultivadas por su fruto, las flores masculinas son estériles Las motas  oscuras en la pulpa indican el resto de los óvulos sin desarrollar.
El fruto
Este grupo de vegetales conforma la fruta tropical más consumida del mundo. Se trata de una falsa baya, con forma de hoz  o elongada, que crece en racimos de hasta 400 unidades y 50 kg de peso; de color amarillo cuando está maduro, es dulce y carnoso, rico en fibras, carbohidratos,  potasio, vitamina A y C,  es bajo en sodio y bajo en  grasas. Es mucho más rico en calorías que la mayor parte de las frutas por su gran contenido en fécula. Contiene los carbohidratos más digeribles (el cuerpo puede quemar las calorías que ofrece mucho más fácilmente que las que provienen de las grasas).

Se cultivan en más de 130 países, desde el sudeste asiático de donde son nativas, hasta Oceanía y Sudamérica; el principal productor mundial es la India, donde se cultiva casi un cuarto de los frutos comercializados en el mundo. El principal exportador es Ecuador, que genera casi un tercio de las exportaciones globales.

Temperatura y pluviosidad
Los bananos son propios de regiones tropicales y subtropicales, y rara vez dan buenos resultados fuera de la banda comprendida entre los 30°N y 30°S;  la mayoría no prospera a más de 600 m de altitud.
La temperatura óptima para la floración ronda los 27º Cy el crecimiento de los frutos se beneficia de una ligeramente superior. Por encima de los 37º C las hojas padecen quemaduras y los frutos se deforman; por debajo de los 16º C el ritmo de desarrollo se reduce sensiblemente. Las heladas son tremendamente perjudiciales; temperaturas debajo del punto de congelación provocan la desecación de las partes verdes y la eventual caída de los pseudotallos y hojas presentes. El rizoma las sobrevive, y vuelve a brotar en cuanto la temperatura es adecuada.
El régimen de lluvias debe ser constante, con unos 100 mm mensuales a lo largo del año, y no más de tres meses de estación seca.
El momento de la plantación depende del clima de la zona; es importante garantizar un buen nivel de humedad en la fase inicial de crecimiento, así como evitar a toda costa el anegamiento.




miércoles, 15 de enero de 2014

VISTOSA HIERBA ARBÓREA

Carica papaya, es una hierba arbórea de la familia de las Caricáceas. Su fruto se conoce como papaya, papayo, mamón, melón papaya, melón de árbol, lechosa o fruta bomba.





 

De origen centroamericano, es conocida y empleada en casi toda América desde hace varios siglos, aunque hoy en día se cultiva en países de otros continentes, principalmente, en Asia y África.

La planta posee un tronco sin ramas, de una altura entre 1,8 y 2,5 m, de textura suculenta y turgente;  presenta numerosas cicatrices  producto del crecimiento y caída consecutivas del follaje superior, del que permanecen los largos pecíolos.

La savia es de consistencia lechosa,  puede ser urticante  y   producir irritaciones alérgicas en contacto con la piel. Contiene una enzima, la papaína, empleada, entre otros usos,  como tiernizante de carnes: en las parrillas se emplea el jugo que fluye al cortar la corteza verde para rociarlo sobre la carne, que resulta sumamente tierna y jugosa.




Los arbustos de papayo pueden ser de tres pies diferentes: con flores femeninas, hermafroditas o con flores masculinas; en este último caso no fructifican, solo son útiles a los efectos de la polinización.




El follaje tiene forma circular; las hojas son palmeadas, lobuladas,  de 7-11 lóbulos, de unos 25 cm de diámetro, alternas, aglomeradas en el ápice del tronco, con fuertes  nervaduras.  Son de color verde oscuro o verde amarillento, brillante; por el envés,  verde amarillento claro y opaco, con nervaduras prominentes. Poseen largos pecíolos, de más de 60 cm, de forma fistular (parecidos a una caña por la oquedad, pero más frágiles) y redondeada.

El fruto, de  textura suave y forma oblonga,  puede ser de color verde, amarillo, naranja o rosa, pudiendo pesar desde 500 g hasta varios kilogramos. Es una baya grande, carnosa, jugosa, ranurada longitudinalmente en su parte superior, con numerosas semillas parietales  de color negro, redondeadas u ovoides y encerradas en una envoltura  transparente.  El desarrollo de los frutos produce la caída de las hojas inferiores, por lo que quedan siempre al descubierto por debajo de las hojas. Usualmente es consumido crudo, sin su cáscara o sus semillas. Posee una cantidad relativamente alta de pectina, lo cual facilita la  preparación de  mermeladas. Las semillas negras tienen un sabor fuerte pero son comestibles. Algunas veces son molidas y usadas como substituto de la pimienta negra.
La propagación por semillas es la forma más común de cultivo. Se obtendrán distintos resultados, según se empleen semillas procedentes de árboles femeninos o hermafroditas. El poder germinativo es corto, por lo que se realizará la siembra cerca de su recolección.



jueves, 9 de enero de 2014

UNA FLOR...¡RIQUÍSIMA!


Nombres  vulgares: alcachofa, alcaucil, cardo de cultivo.
Nombre científico: Cynara scolymus
Familia: Compuestas o Asteráceas, al igual que plantas tan conocidas como las margaritas.
Origen: costas del mar Mediterráneo, sur de Europa y África del norte.

 La alcachofa es una planta perenne, vivaz, que en producción hortícola de regadío suele durar 2 ó 3 años. Prefiere los suelos franco-arenosos con añadido de materia orgánica y buen drenaje. No soporta las heladas.

Posee rizoma con raíces gruesas y yemas que brotan a lo largo del año. También puede reproducirse  mediante semillas  o por esquejes de ramas tiernas. El fruto es un aquenio grisáceo de forma oblonga y  las semillas conservan su poder germinativo por más de seis años.
Las hojas son grandes, vistosas, largas (0,90 a 1 m.), pubescentes, de color verde claro por encima, plateadas y vellosas  por el envés. Los nervios centrales están muy marcados y el limbo dividido en lóbulos laterales; son similares a las de los cardos (especie silvestre que fue su antecesora) pero con menos espinas.

 Las flores, de color azul violáceo, están agrupadas en capítulos que nos recuerdan a una flor única pero  en realidad constituyen una inflorescencia. Los capítulos están formados por una base donde se instalan las flores, llamado receptáculo, y un conjunto de brácteas que recuerdan a un cáliz y que constituyen el involucro.

El receptáculo floral del alcaucil es comestible, muy sabroso y tierno, llamado comúnmente “corazón”, y aporta a nuestra dieta agua, carbohidratos, fibra, vitaminas, proteínas y minerales.  El capítulo, de color verde,  adopta una forma entre oval y redondeada; se puede consumir hervido o al vapor, separando hoja por hoja,  que en realidad son brácteas modificadas, y retirando su parte tierna.

La alcachofa posee propiedades medicinales como hipoglucemiante; favorece el metabolismo de la urea y del colesterol.

El alcaucil es un placer para el paladar más exigente. Es importante destacar que su particular sabor, cuyo responsable es un  compuesto denominado cinarina, confiere al vino un gusto metálico que complica su maridaje, a la hora de elegirlo.

Pero el buen gourmet ha demostrado a través del tiempo que puede superar obstáculos, cuando de placeres gastronómicos se trata.