sábado, 13 de noviembre de 2010

LA FLOR NACIONAL RIOPLATENSE

El mítico ceibo representa, según la leyenda guaraní, el valor y el sacrificio de una joven nativa, llamada Anahí, que murió en la hoguera, defendiendo a su tribu. Se cuenta que, en el mismo lugar, brotó un bello árbol, cubierto de flores tan rojas como la sangre que derramara por su pueblo.
Más allá de esta tradicional historia, aún vigente en la mesopotamia argentina, el ceibo conmueve con su sola presencia. Erythrina crista-galli, de la familia de las Fabáceas (anterior denominación: Leguminosas), es un árbol de ramas arqueadas y retorcidas, sobre un tronco no muy alto, a veces múltiple desde la base, de corteza muy rugosa (ideal para sujeción de epífitas, como la pequeña orquídea Oncidium biflorum), con marcados hábitos arbustivos y bonitas hojas trifoliadas*, de largos pecíolos.
Es autóctono de las zonas fluviales del litoral argentino-paraguayo-uruguayo, que constituyen la cuenca del Plata. Puebla las riberas y áreas anegadizas, contribuyendo a la consolidación del terreno en islas o suelos inestables. Forma característicos montes puros, los ceibales, hábitat ideal para colibríes, abejorros y mariposas.
La floración es muy llamativa; las preciosas flores son rojas, carnosas, papilonáceas, es decir, con corola amariposada y un destacado pétalo principal, por el que se deslizan fácilmente los insectos polinizadores hasta alcanzar los estambres. Están reunidas en magníficos y densos racimos terminales.
El fruto es una legumbre oscura, de 10-20 cm., que contiene varias semillas.
En nuestra ciudad y sus alrededores hay profusión de ceibos, y los que tengan la posibilidad de viajar a Entre Ríos u otros lugares del delta del Paraná, o a los bellos parajes de las dos orillas del río Uruguay,  no lo duden: este es el momento en que reina el ceibo, la flor nacional de Argentina y Uruguay, otro de los muchos  motivos que nos unen  a  nuestros hermanos del otro lado del charco.






                                                                             

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.